Son fácilmente mecanizables y ensamblables, lo que optimiza tanto el
tiempo como el costo de instalación. Además, pueden ser cortadas,, amarradas,
remachadas, atornilladas, soldadas, pintadas e impresas según las necesidades.
Sus aplicaciones abarcan fachadas, interiores, soportes gráficos, carros de
arrastre, módulos de faenas, entre otros.
Una de las aplicaciones más destacadas del aluminio compuesto es su
empleo en la edificación de estructuras arquitectónicas y en proyectos de
renovación. Estos paneles son versátiles y pueden ser utilizados tanto en el
interior como en el exterior de los edificios.